Taller 5 Secretos en Buenos Aires
Recomendado hacer las dos unidades, pero también se puede hacer solo una de las dos.
Modalidad presencial. Actividad para todo público. No se requiere experiencia previa. Cupos limitados.
Soy María Clara. Ustedes me conocen a partir de las mini clases de Feldenkrais. Y les he contado que año tras año, durante casi 20 años, fui al encuentro de Ruthy Alon (discípula del Dr Feldenkrais) en distintos lugares del mundo para profundizar en su propuesta de Inteligencia del movimiento.
El movimiento provee un acceso directo al sistema del ser humano. Desde allí, podemos conectar con nuestro poder personal.
No hay una sola puerta, ni un solo camino que vaya a funcionar todas y cada una de las veces. Ruthy exploró decenas de estrategias para el cambio. En este taller invitaré a profundizar en 5 secretos, 5 conceptos claves.
En este taller quiero honrar el legado de Ruthy Alon a través de 5 propuestas que nos pueden ayudar a armar nuestro propio mapa:
- La Inteligencia del Movimiento – Ruthy no hablaba de movimiento inteligente, pues eso supone que habría movimientos no inteligentes… ¿y en base a qué criterios los juzgaríamos? Sería otra vez imponer parámetros externos. En cambio, Ruthy integró todos sus programas bajo el nombre de inteligencia del movimiento, en la convicción de que el movimiento tiene en sí mismo una inteligencia que conecta con una sabiduría muy antigua, una codificación humana que incluye la relación cuerpo-mente. Necesitamos entonces descubrir su lenguaje: de qué manera nos habla, nos sugiere, nos guía.
- La vibración – De todos los movimientos, el más pequeño es la vibración. Ocurre en el nivel subatómico y en los átomos, la llevamos dentro de las células. Le sigue la pulsación, la que conocemos desde los orígenes de la vida. Los organismos unicelulares la usaron en el mar primordial para acercarse al alimento o alejarse del peligro. El pulso contrae y suelta. Es el comienzo del ritmo.
- El autotoque – Consiste en sensibilizar las manos y aprender a usarlas como maestras, como guías para optimizar el movimiento, para mostrarnos la calidad de nuestro tono y despertar un aprendizaje profundo mediante toques observadores. Como una autointegración.
- Los patrones de locomoción evolutivos – En nuestra biología también llevamos inscriptos todos los patrones de locomoción que resultaron exitosos a lo largo de la evolución de la vida sobre el planeta. Onda y eje, por ejemplo, o las espirales o la homo y la contralateralidad – es decir, los patrones de movimiento de los seres vivos más complejos. Todos forman parte de la sabiduría de nuestro sistema cuerpo-mente.
- Las estrategias cotidianas para incorporar los cambios – La novedad se produce en la acción. Experimentamos estas herramientas en secuencias de movimiento de 15 a 20 minutos para generar un cambio de calidad, pero ¿cómo confirmamos luego el aprendizaje? ¿Cómo hacemos para conservar en lo cotidiano esa nueva información que ingresa al sistema y generar un nuevo patrón?
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